Los consumidores en los EE. UU. no ven como prioridad comprar un auto eléctrico, ya que solo las ventas de los vehículos eléctricos de Hyundai-Kia solo fueron inferiores a las de Tesla en la primera mitad del año, ya que otras compañías ni se han podido acercar al fabricante comandado por Elon Musk.

Ford y GM se quedaron muy atrás, algo que denota la falta de interés de los consumidores de los estados del centro del pais.

Las ventas del primer semestre de Tesla fueron 336.892. Los de Hyundai-Kia fueron 38,457, un 11% más que hace un año. Los de Ford fueron 25,709, un 12% más.

Ford explicó el bajo rendimiento mediante la remodelación de las instalaciones de fabricación que fabrican el Mustang Mach-E.

El F-150 Lighting, el buque insignia EV de Ford, tuvo ventas de solo 8,757 en la primera mitad. Muestra que la línea de vehículos eléctricos de Ford sigue siendo muy baja.

Los datos muestran aún más el verdadero desafío de Ford, que no es Tesla. Todos los principales fabricantes de automóviles están compitiendo para obtener participación en el mercado estadounidense, el segundo más grande a nivel mundial, después de China, VW vendió 26.538 EV en los EE. UU. durante la primera mitad.

Nissan se encuentra entre los mejores ejemplos del éxito inicial de los vehículos eléctricos

El Nissan Leaf ha sido su único producto EV real, ya no. El nuevo Ariya se ha vendido bien recientemente y probablemente será el vehículo eléctrico más exitoso de la compañía japonesa para el resto del año.

Es raro que los planes de Nissan, durante un período prolongado, difieran sustancialmente de los de Honda y Toyota, lo que significa que estos dos tendrán grandes flotas de vehículos eléctricos. Toyota ha sido criticada por el lento desarrollo de su estrategia EV.

El segmento de lujo es la otra parte del mercado de vehículos eléctricos en la que las grandes empresas de automóviles han tenido éxito. Recientemente, BMW, Porsche y Cadillac han comercializado agresivamente nuevos vehículos eléctricos.

Tanto Ford como GM tienen enormes redes de concesionarios y servicios, una ventaja potencial sobre Tesla, pero hoy en día no es una ventaja competitiva en una industria donde las redes de concesionarios son parte de la estrategia de casi todas las compañías automotrices.

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